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08 noviembre, 2023

La Verdadera Historia de la Muñeca Annabelle: Más Allá de la Pantalla de Cine

La muñeca Annabelle ha aterrorizado a las audiencias de todo el mundo a través de la serie de películas de terror de ‘El Conjuro’. Pero, ¿sabías que la historia de Annabelle se basa en hechos reales? Aquí te cuento la escalofriante historia real detrás de esta famosa muñeca.

Orígenes de Annabelle

A diferencia de las representaciones cinematográficas, la verdadera Annabelle es una muñeca de trapo creada por Johnny Gruelle en 1918, conocida como Raggedy Ann. La historia de esta muñeca maldita comenzó en 1970 cuando una madre compró la muñeca y se la regaló a su hija Donna, quien estudiaba enfermería.

Comportamiento Extraño

Donna y su compañera de cuarto, Angie, comenzaron a notar situaciones extrañas poco después de recibir la muñeca. La muñeca parecía moverse por sí misma, apareciendo en lugares donde no la habían dejado. Incluso encontraron lo que parecía ser sangre en la muñeca.

La Medium y Annabelle

Preocupadas por estos eventos inquietantes, Donna y Angie buscaron la ayuda de una médium. Durante una sesión de espiritismo, la médium les informó que el espíritu de una niña de 7 años, llamada Annabelle Higgins, había poseído a la muñeca.

Los Warren y Annabelle

La situación empeoró, y finalmente, Donna y Angie buscaron la ayuda de los famosos investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren. Los Warren concluyeron que la muñeca estaba siendo manipulada por un espíritu inhumano, un demonio, que pretendía ser el espíritu de una niña.

Annabelle Hoy

Hoy en día, la muñeca Annabelle se encuentra en el Museo de Ocultismo de los Warren, ubicado en Monroe, Connecticut. A pesar de los rumores de que la muñeca había escapado de su vitrina en 2020, estos fueron desmentidos por el nieto de los Warren, Chris McKinnell.

La historia de Annabelle es un recordatorio escalofriante de que, a veces, la realidad puede ser más aterradora que la ficción. Así que la próxima vez que veas a Annabelle en la pantalla grande, recuerda: la verdadera Annabelle todavía está ahí fuera, encerrada en su vitrina en el Museo de los Warren.